25 de noviembre de 2024

Tijuana B.C. (Agencias) 2 de diciembre de 2014.- Ridley Scott dirige Éxodo: Dioses y Reyes (Exodus: Gods and Kings), su nueva cinta épica que cuenta de una manera diferente el clásico cuento bíblico del Éxodo. Este filme, que se estrena en México este jueves 4 de diciembre, cuenta con las actuaciones de Christian Bale, Joel Edgerton, John Turturro, Aaron Paul, Sigourney Weaver y Ben Kingsley.

Éxodo: Dioses y Reyes comienza con un Moisés (Bale) y un Ramsés II (Edgerton) ya adultos pero siendo hermanos. Nunca se explora en video la infancia de estos dos personajes (aunque sí se mencionan ciertos aspectos de Moisés más adelante), así que no pasan muchos minutos para ver la primer batalla gigantesca. Por razones que suceden que seguramente muchos conocen (y si no, mejor no las mencionamos para no hacer spoilers), Moisés es exiliado de Egipto y en su viaje alejándose de su pasado llegará a un lugar donde formará una familia. Pasan nueve años en los que lleva una vida tranquila, hasta que, por tal de recuperar unos animales, se dirige a una montaña donde tendrá su primer encuentro con “Dios”.

Y digo “Dios” entre comillas porque el enfoque de la cinta es hasta cierto punto realista. Sí, a los que no les interesa la religión quizá les agradará saber que el guión intenta explicar ciertos aspectos del cuento como si pudiesen suceder en la vida real, como por ejemplo que las visiones que tiene Moisés respecto a su Dios pudieran haber sido creadas por un problema en su cabeza, o que las plagas que azotan a Egipto fueron consecuencia de un pequeño suceso que desencadenó eventos más grandes en el medio ambiente local (incluso hay una escena donde un “científico” egipcio explica cómo es que se pudo convertir el agua en “sangre” y cómo es que llegaron miles y miles de ranas). Lamentablemente no todas son tan realistas como las otras, así que la seriedad se pierde ya casi para el final del filme donde lo sobrenatural toma posesión del guión.

Hablando del guión, desafortunadamente éste no es de lo mejor, se ve que el director intentó hacer lo mejor posible con él, pero tampoco hace “milagros” (get it?). El ritmo de la cinta es muy lento (y peor, dura dos horas y media toda la película) pero por fortuna muchas escenas son muy bien filmadas y también la banda sonora es excelente  ayudando a que no se hagan ciertas secuencias tan pesadas. Las actuaciones son buenas en general, pero algunos actores no fueron aprovechados (como Sigourney Weaver o incluso Aaron Paul). Otro punto en contra es el hecho de que el final no es tan satisfactorio (simplemente le da un vistazo a lo que sigue después del “éxodo”). Los efectos especiales están bien logrados (la mejor escena es “cuando se abre el mar”), y aunque puede llamarte la atención verlas en 3D, lamentamos informar que ver este filme en ese formato no tiene ningún agregado real puesto que éste efecto óptico no se aprovechó.

 Éxodo: Dioses y Reyes es recomendada para los seguidores del director (quien le dedica el filme a su fallecido hermano Tony) y también para los que les gusta ver cintas inspiradas en cuentos bíblicos pero que no sean religiosos de hueso colorado (de ser así no les gustará "lo realista"). Si te molestaron los "cambios" que le hizo Darren Aronofsky a Noé, quizá esta versión de Moisés no te va a agradar tanto.