26 de abril de 2024
No recuerdo con exactitud si era novillero o ya consagrado como matador, un chaval de apodo " El Cachorro " mexicano pero desconozco el lugar de su nacimiento,

 

 Argos Panoptes

 

 

Recuerdo que corría el año de 2013 cuando tuve la oportunidad de presenciar una corrida de toros el la aplaza monumental a la orilla de el mar en aquella ciudad fronteriza de nombre Tijuana, la heroica Tijuana de Zaragoza, en donde empieza la patria.

No recuerdo con exactitud si era novillero o ya consagrado como matador, un chaval de apodo » El Cachorro » mexicano pero desconozco el lugar de su nacimiento, un joven corpulento, moreno claro, cabello lacio y vestía un traje en granada y oro.

A legua se le observaba algo no muy diestro en el arte de la tauromaquia, inseguro y en ocasiones torpe al desplazarse.

Al momento de querer cumplir el tercer tercio con el primero de la tarde, empezó a fallar una y otra vez, obviamente el respetable exigiéndole que finiquitara su suerte y el Juez de plaza con el segundo aviso. La tensión era extrema para el joven matador que no paraba de sudar cuando de repente en el silencio que se dejó sentir al tirarse a matar por última vez a su toro, se escuchó una voz de un ronco pecho que desesperado le gritó » Pídele a Dios un rayo cabron » ante tal grito que retumbó al centro y exterior de la plaza monumental, el público se puso de pie y honró con más de un minuto de aplausos al sexagenario experimentado el la fiesta taurina y que inmediatamente le agradecían tal exhortó al torero haciéndole llegar un rio de cerveza por tal echo.
Quizá una grosería por parte de él aficionado sin embargo pues fue un grito de motivación.

Pues bien mis estimados lectores, sin ser un experto en el arte de el toreo y mucho menos en la política, día día es lo que se ve en Baja California.

Candidatos desesperados…por ser los oficiales de sus partidos o colaciones y el ver que día a día más y más interesados se suben al barco político que le piden a Dios un rayo para que desplace a los participantes y ser uno solo, el interesado, el elegido.

Pedirle a Dios un rayo para que ya nada se interponga en ese camino, pedirle a Dios un rayo para que ya nadie se sume, pedirle a Dios un rayo para que nadie le estorbe.

En algunos partidos débiles es notorio el desinterés de la ciudadanía, sin embargo en las coaliciones de Morena, hasta los que menos se imaginaban se están registrando ocasionando piedras en el camino para los verdaderos interesados.

Y de la coalición que encabeza el PAN pues… salen a buscar un torero o torera para que se tire a matar.

Te amo papá. Con cariño.