17 de noviembre de 2024
Las agrupaciones criminales suelen tener una estructura compleja en la cual van integrando diversos elementos que cumplirán un trabajo específico, estas organizaciones generalmente eran mostrada ante la sociedad como un problema masculinos y era sorprendente cuando se detectaba la participación

Por Beatriz Aguilar Alejandrez

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Las agrupaciones criminales suelen tener una estructura compleja en la cual van integrando diversos elementos que cumplirán un trabajo específico, estas organizaciones generalmente eran mostrada ante la sociedad como un problema masculinos y era sorprendente cuando se detectaba la participación de una mujer, lamentablemente la incursión de esta en las últimas décadas se ha ido incrementando, volviéndose más frecuente y un fenómeno global, el porcentaje de participación varía dependiendo el tipo de delito.

En el siglo XX surgieron teorías del tipo psicosocial donde se consideró que las tipologías eran útiles para determinar la delincuencia femenina pero que se debía investigar más sobre las conductas denominadas como anormales, para las corrientes liberales de ese tiempo la delincuencia femenina era considerada como una enfermedad o desadaptación y que ameritaba tratamiento. Desde una perspectiva histórica los delitos tenían su nivel de gravedad dependiendo quien los cometía, un ejemplo de ello era el adulterio, en la cultura china, si a un hombre casado se le encontraba con una mujer casada, la pena capital era para ella ya que para el hombre este acto no era considerado como grave.

Según un artículo del 2002 en Salud Mental emitido por Martha Romero del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz del Distrito Federal menciona que hay teorías psicobiológicas sobre el porque delinque una mujer, una de las teorías hace referencia a la Sexualidad precoz: ya que consideraban que las niñas que iniciaban su vida sexual a edad muy temprana eran más proclives a involucrarse con mayor facilidad en conductas antisociales, aunque esta teoría no es tomada en serio en la actualidad, otro investigador refiere que las adolescentes suelen ser más atractivas para los jóvenes de mayor edad y por este hecho, ellas son expuestas a lugares y grupos de alto riesgo.

Otras teorías que se abordaron del porque delinquen están relacionadas con la función hormonal y el síndrome premenstrual, ya que esto provoca irritabilidad y un juicio pobre, según la investigadora Katharina Dalton, los estudios concluyeron que estas podrían incurrir en suicidio o ser más agresivas o antisociales durante esta etapa, siendo nuevamente un análisis sin una base científica, en esta última teoría se pudiera manejar a la inversa, que el estrés físico y psicológico pudieran producir alteraciones menstruales.

México es un país que está conformado en su mayoría por mujeres y si nos basamos en cifras delictivas son significativamente menores que la de los hombres, las mujeres han sido más víctimas que delincuentes, demostrando con esto su vulnerabilidad. En 2013 el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía INEGI presentó estadísticas del fuero común, registrando que 9,753 mujeres fueron sentenciadas por delitos de: robo, golpes, lesiones y daños a los bienes ajenos, en el fuero federal se registró que 2,430 fueron sentenciadas por delitos de: Narcotráfico, actos ilícitos que involucraban armas y defraudación fiscal.

Todas estas teorías han mencionado que cuando una mujer delinque la sociedad lo registra culturalmente como una acción antinatural, un acto de desafío a la postura que una mujer por estereotipo debe tener, lo cierto aquí es que los factores económicos por si solos no son el detonante para las acciones delictivas, muchas inician siendo víctimas y terminan siendo victimarias, el autosaboteo se evidencia en cada uno de sus actos, las niñas y mujeres deben reconocer el potencial que como individuos tienen y que está en sus manos ocupar un lugar sobresaliente en nuestra sociedad.