En días pasados nos dimos cuenta que en la Ciudad de Tijuana Baja California, se remplazaba una cámara de videovigilancia en la Zona Centro de esta fronteriza Ciudad, para ser exactos sobre la Avenida Galeana y Niños Héroes.
En dicha esquina muy transitada y con una afluencia importante de empresas y servicios desde agencias funerarias hasta lectura de tarot, fuimos testigos de cómo empleados y técnicos del Ayuntamiento, remplazaban una cámara de videovigilancia, tal cambio a simple vista se miraba de reciente modelo a comparación de la anterior que ya tenía por lo menos y bajita la mano más de 10 años.
Como todo en la vida y nada es para siempre nos dimos a la tarea de consultar a especialistas en la materia de video vigilancia y seguridad patrimonial, informándonos lo siguiente.
Qué tal aparato recién instalado tiene un costo aproximado de 280 dólares hasta 1200 dólares solo venta, instalación, programación y mantenimiento por lo menos de un año.
Que las cuatro cámaras de punto fijo son un complemento para la identificación temprana de cualquier incidente con un costo de 35 dólares en adelante sin límite de precio.
Que la nueva cámara instalada era giratoria de 360 grados conocidas como PTZ.
Que la cámara reemplazada tenía ya sus días contados por la antigüedad de el equipo, desgaste y una plataforma análoga obsoleta.
Que las nuevas cámaras instaladas como punto fijo y PTZ, cuentan con un sistema IP, una plataforma digital que opera por medio de internet con funcionamientos de enlaces vía micro ondas de punto a punto esto quiere decir de antena a antena instalada.
Dichas cámaras cuentan con batería de respaldo, antena para enlace y gabinete contra daños y vandalismo.
El costo de la inseguridad en una sola cámara. Que será multiplicada por cientos como lo exige día a día en la ciudad.