17 de noviembre de 2024
Dos entrenamientos por semana y un partido los martes por la noche.

Creo que era el año de 1990/1991 aproximadamente, cuando el equipo de fútbol Solitarios de la prestigiada liga Alba Roja en la ciudad de Tijuana me invitó a jugar fútbol, en la portería, yo un joven como de 16 años más o menos, y con bastantes ganas de hacer historia en un equipo muy prestigioso en ese momento, a tal grado que teníamos un sueldo por partido y entrenamientos.

Dos entrenamientos por semana y un partido los martes por la noche.

Obviamente era menor de estas pero mi físico me daba para jugar de cachirul algo que jamás supe hasta que cumplí los 18 años.

En un juego, recuerdo muy bien que era contra el Bondojo, tenían un delantero estrella, no recuerdo su nombre pero era muy bueno, metió goles increíbles, con ellos nos medimos, un martes por la noche en los campos de Otay, en El Romero Manzo, un campo semifinal profesional para esas fechas.

En una jugada, tuve que brincar para atrapar el balón y con la rodilla derecha atropelle a tan flamante figura deportiva en la ciudad, al delantero de el Bondojo y cayó de bruces, acostumbrado a que nadie lo chocaba, se topó con 1.85 de estatura y con 100 kg. de peso, mordió el polvo, recuerdo que se levantó, se sacudió y me dijo » Ala vuelta venden pan pinche morro » …. Yo, callado tome el balón y lo despeje.

Terminando el primer tiempo consulte al entrenador de nuestro equipo, recuerdo que le decían el abuelo Guzmán comentándole lo que la figura deportiva me dijo, que si me podía explicar qué significaba tal frase, a lo que me contestó tomándome de el hombro.. Mira hijo, te quiso decir que en la siguiente jugada te partiría tu madre ….

Obviamente me asuste, quede atónico, no quería ya entrar a jugar hasta que me obligaron, me sudaban las manos y me temblaban las piernas y pues así fue mis estimado lectores en la siguiente jugada, un balón por los aires, brinco y me zumba, caí de una manera tan accidentada que se me salió el aire y las lágrimas, » le dije morro que me las pagaría «
Me lo dijo casi al oído cuando trataba de jalar aire.

Pues bien mis estimados lectores, tal grave amenazadora de » A la vuelta venden pan » es lo que se está viviendo al interior de los partidos políticos en Baja California, enojos, molestias, tomas de oficina, amenazas, ofensas públicas y de más, y lo que es peor, es en Morena en donde más se ve y se lee dichos actos y comentarios, para muestra un enorme botón, que botón ni que nada, todo el saco completo.

La distinguida Senadora por BC Alejandra León, no quedó conforme cuando le dijeron que no iba para la gubernatura y mucho menos por la ciudad de Mexicali, fue tanto su coraje que amenazo con una campaña en el estado, recorriéndolo para informar de las malas de su partido, a ciencia cierta es de el PT arropada en Morena.

Tanto coraje que señaló de trampas y triquiñuelas para no ser la elegida.

Y por si fuera poco sólo le falto expresar …. A la vuelta venden pan….