Louisa Manning, ahora de 22 años, recibió una invitación de uno de los niños que la atormentaba por su peso en el colegio
Tijuana B.C. (Agencias) 6 de diciembre de 2014.- Una mujer experimentó dulce venganza con una de las personas que la atormentaba durante su época escolar al dejarlo plantado en una cita. Su historia se popularizó por Facebook.
Louisa Manning, de 22 años y estudiante de Oxford, indicó que hace unos días se cruzó con un antiguo conocido de colegio que solía burlarse de ella por su peso.
El joven, quizás al ver a la chica más atractiva, la invitó a una cita. Manning sostiene que estuvo sorprendida por la proposición, pero después de pensarlo decidió aprovechar la situación para cobrar venganza.
Cuando el joven, cuyo nombre no ha sido revelado, acudió al restaurante donde se habían citado, un mesero lo esperaba con la siguiente nota junto a una fotografía de Manning cuando era niña:
“Hey [nombre borrado]
Lamento que no pueda reunirme contigo esta noche.
¿Recuerdas el octavo grado, cuando yo era gorda y te burlabas de mi peso? ¿No? Yo sí – pase los siguientes tres años comiendo menos de una manzana al día. Así que decidí evitar esta cena.
¿Recuerdas la uniceja de la que te burlabas? ¿Las piernas peludas que te disgustaban? ¿Recuerdas cómo cada día por tres años tú y tus amigos me llamaban Manbeast (hombre bestia)? No, quizás no lo haces – o no me habrías visto mi aspecto ocho años después yconsiderado lo suficientemente atractiva para tratarme como un ser humano.
Pensé mandarte esto como un recuerdo. La próxima vez que pienses en mí imagínate la chica en esta foto, porque ella es la que te plantó.
Louisa”
Manning publicó una foto de la carta en Facebook, recibiendo más de cuatro mil Me gusta y cientos de comentarios por el post.
Según indicó Manning Buzzfeed, el joven que fue el objetivo de la venganza se disculpó con ella:
“Hey… por cuanto signifique, yo realmente estaba aquí por la oportunidad de hacer amigos, no solo porque eres atractiva.Supongo que me lo merecía y ciertamente no te culpo por dejarme plantado.
No puedo cambiar quién era hace ocho años y no voy a insultar tu inteligencia pretendiendo que eso no paso, pero espero que me creas cuando digo que soy una persona completamente distinta ahora. Solo puedo disculparme y desearte lo mejor. Supongo que no escucharé de ti de nuevo, pero realmente digo con convicción que espero que tengas todos los éxitos que mereces.”